Cada año abren en España cientos de bares, cafeterías y restaurantes dispuestos a atraer a un cliente cada vez más exigente, y la decoración juega un papel determinante en esa decisión. Por ese motivo, los cocineros y empresarios hosteleros cuentan con estudios de decoración de restaurantes para crear ese ambiente que muestre la filosofía, es estilo y el saber hacer de sus cocinas a través del espacio.
Para crear el ambiente ideal, los expertos en decoración recomiendan, como primer paso, tener claro el concepto del restaurante y centrarnos, así, en su ambientación y decoración global. “Porque la barra y la sala en muchas ocasiones precisan de decoraciones diferentes, que responden a distintas necesidades y adaptarse al espacio”, explica la experta Luisa López Tellería, profesora del Basque Culinary Center y asesora en la plataforma de formación e información Bartalent Lab para hostelería.

La hostelería se suma a la caza de las últimas tendencias de interiores y crea espacios bonitos y funcionales para hacer redonda la experiencia de los clientes que acuden a sus locales. Las modas cambian y se reflejan, también, en bares y restaurantes. Estas son algunas de las tendencias en decoración en las que fijarse para nuevas aperturas o reformas:
1. Estilo nórdico

Las líneas sencillas y funcionales son las señas de identidad de este estilo escandinavo que reproduce los diseños de los años 50. Tanto en las piezas y el mobiliario, como en el propio utillaje. Su gama de colores es neutra y muy suave, en tonos grises y blancos con algunos verdes y azules apagados. En contraste con lo anterior, sus materiales se presentan en bruto, sin refinar, con el objetivo de recordar a la naturaleza. No es un estilo muy costoso porque se usa en la decoración y la arquitectura de toda clase de establecimientos. Reproduce un ambiente sereno, tranquilo, cercano a la naturaleza y con connotaciones ecológicas y sostenibles.
2. Estilo Industrial

Llegó hace años a la decoración de restaurantes y se mantiene. Tubos de climatización a la vista, mobiliario de metal, maderas envejecidas, paredes desnudas o de ladrillo visto, suelos de cemento… Este estilo utiliza materiales y estructuras que recuerda a las fábricas y talleres del siglo XIX. En ocasiones, se restauran edificios que ya tienen este estilo y estas características y, en otras, se recrea en nuevos espacios. Predominan los colores grises, marrones y negros, en toda su gama y los muebles tienen un cierto aspecto desgastado, como viejos sillones y sofás de cuero. La iluminación utiliza grandes focos o bombillas que recuerdan las antiguas de filamentos.
3. Estilo Minimal

Es un acierto seguro en la decoración de restaurantes. El minimalismo, que ha pasado por altibajos en diseño de interiores, viene con energías renovadas y nuevas propuestas para la decoración de bares, restaurantes y cafeterías. Espacios limpios, orgánicos y despejados de elementos innecesarios, es la elección de muchos empresarios hosteleros como imagen de sus negocios.
4. Bancos corridos y terciopelo

Para aprovechar mejor el espacio, los decoradores recurren a los bancos corridos, asientos pegados a la pared que se montan como un sofá largo, mullido y cómodo. Los vemos en grandes espacios y en restaurantes pequeños. Y si no fijamos en la tapicería, el terciopelo es el ganador absoluto: en colores clásicos, rojos, verdes y azules, atrevidos amarillos e incluso en estampados de flores.
5. Maderas y fibras naturales

Los materiales preferidos para vestir los restaurantes son los naturales. La madera, el ratán y el mimbre tienen gran protagonismo, en toda la decoración. También piedras y mármoles poco pulidos. Y es que, los materiales naturales son más tendencia que nunca, y las mesas de madera se convierten en protagonistas con historia propia. Para lucirlas, se evita el uso de manteles, sea cual sea el estilo de restaurante o de la cafetería. Hoy en día, dejar a la vista la calidez de la materia, las imperfecciones o las huellas del uso es una de las tendencias en hostelería, sobre todo en los locales dedicados a la cocina fusión o donde la coctelería tiene un lugar destacado.
6. Todo al verde

Palmeras, verdes vibrantes, estampados tropicales… el estilo tropical invade los locales más top del momento. La vegetación se ha convertido en uno de los principales elementos en la decoración de los restaurantes y en ese afán de crear un ambiente natural y sostenible, los restaurantes se llenan de plantas y jardines verticales para la decoración de las paredes. Lo suyo es que sean naturales, y más, si se quieren evitar la instalación de elementos inflamables, pero también hay que asesorarse bien, para que las plantas elegidas no se conviertan en un nido de bichos o suciedad. Por ello, una de las soluciones es optar por las flores y plantas preservadas, perfectas para la decoración de restaurantes porque son flores naturales que mantienen su belleza en el tiempo sin necesitar prácticamente ningún mantenimiento (no necesitan ni agua ni luz).
7. El boom de la parrilla

La pasión por las brasas y el humo no para de crecer, y los restaurantes-asadores, al estilo vasco y, sobre todo, argentinos, han creado una tendencia en decoración. Se trata de espacios amplios, con paredes de ladrillo visto, mesas de madera rústica, la parrilla normalmente a la vista para dejarse atrapar por la magia del fuego, y luz tenue, que se acompaña de velas sobre las mesas para crear un ambiente aún más íntimo.
8. Vivan las barras

Las barras son las protagonistas indiscutibles en los espacios de restauración. Los restaurantes que quieren captar la atención de sus clientes apuestan por barras con frontales con relieve (creados con azulejos o con paneles de cristal o de espejo), con líneas verticales y colores trendy. Y la última tendencia es convertir la barra en el centro de todas las miradas, colocándola, precisamente, en el centro del local ocupando un lugar privilegiado. Comer en la barra, siguiendo de cerca el trabajo de los cocineros, es ya la opción más buscada, sobre todo las barras de sushi.

Esa misma barra se convierte también en el lugar preferido para tomar una copa o un cóctel sentados en un lugar tan privilegiado.
9. Iluminación, al detalle

En cualquier local, la luz es esencial, sobre todo porque es la responsable de iluminar los platos y hacerlos más o menos apetitosos. Por supuesto, la comida entra por la vista, y generará una u otra impresión en los clientes. Por tanto, asegúrate de que todas las mesas tienen una buena iluminación y que, de nuevo, resaltas todo el encanto de tu local. De hecho, 7 de cada 10 personas cree que la iluminación es clave cuando eligen un restaurante, por lo que no hay que perderlo de vista.
La luz natural que entre por ventanas o ventanales, incluso por un tragaluz, aportará siempre valor al ambiente en la decoración de restaurantes, pero siempre hay que elegir un tipo de iluminación más directa en las mesas, con diferentes texturas, a la vez que colocan luces ambientales de fondo para que no quede todo a oscuras. El foco debe estar en las mesas.
10. Cocinas abiertas

El furor por las cocinas abiertas viene de largo, pero ahora ya es algo más que una tendencia al alza. Así pues, si la cocina ha de enseñarse, que esté milimétricamente pensada. Así, las cocinas tienen que ser una forma innovadora de ganarse la confianza de los clientes, por lo que todo tiene que estar en orden para evitar ruidos de cacharros o conversaciones con un tono alto entre los cocineros. Conviene también diseñar muy bien todo el tema de la extracción de humos al no contar con paredes que separen la sala con la cocina, pero teniendo en cuenta el ruido que puede provocar para que no sea molesto para los comensales. Una opción es la de colocar un cristal que aisle de los ruidos y que, al mismo tiempo, permita ver el trabajo en cocina.